El día a día. Las grandes
noticias. Ellas, que hacen a los temas de conversación. Las portadas de
los diarios más importantes. La jungla sin ley. Amén. La razón al servicio del
mejor postor. "Con caniíbales rentados enseñando a masticar ", dijo el maestro, en una de sus tantas canciones. Corderos atados que adulan signos. Metamorfosis que no
discrimina clases sociales. Las teorías de la comunicación y de manipulación
que no fueron refutadas. El amorfo perfecto al servicio de la “gente dice
que…” ; “la gente cree que…”. Las mediaciones interesadas. El panóptico de
Focault. Gran hermano su pieza publicitaria. La castración del pensamiento. Los
chicos de antes que señalan con el dedo a los chicos de ahora. La oratoria que
domina al vulgo según los fundamentalistas de saco y corbata, que discuten
poder desde el poder. Un pueblo originario que perdió sus tierras por el auge
del turismo. La inseguridad y su correlación con las puertas Pentágono y la más
sofisticada casa de alarmas.
El nuevo concepto, el de moda: el periodismo jurisprudente. Las marionetas que palabrean verdades de cocinas. Hasta cuando, dijo Capussotto. La leyenda, nacional y popular, que reza y asegura que "Clarín miente". El riverboquismo de la política. Los medios buscando colectivos hipotéticos para llenarse la panza. Vos, yo, todos. Somos esos numeritos que esconden personas, de piel y hueso, cuando la necesidad se hace primicia en la cara de los flashes. Un barrio (a)bajo, una señal. El charquito que se hizo río y que inundó de sueños.
Las bandas de música que se pelean, "lo hacen por guita", dice la independencia, y se terminan separando por la cara de Roca. Los analistas que rellenan espacios y se sientan a explicarnos el mundillo de la aritmética después de leer el diario. Las explicaciones para todos, el petróleo. La nueva mafia, la de los manteros, esos puesteros giles que venden películas cagándole la vida y el trabajo a toda la Warner Bross. El humor como pieza de pensamiento. La burla que denuncia la estafa corriéndose de la denuncia. La historia de las personas que en cada acto de destrucción encuentra su respuesta, tarde o temprano, en un acto de creación. Las parte de una trama que nos contaron los dueños de la palabra semidesnuda. La parte que falta desandar y revisar para que el populismo sienta que sus tripas pueden respirar tranquilas.
El nuevo concepto, el de moda: el periodismo jurisprudente. Las marionetas que palabrean verdades de cocinas. Hasta cuando, dijo Capussotto. La leyenda, nacional y popular, que reza y asegura que "Clarín miente". El riverboquismo de la política. Los medios buscando colectivos hipotéticos para llenarse la panza. Vos, yo, todos. Somos esos numeritos que esconden personas, de piel y hueso, cuando la necesidad se hace primicia en la cara de los flashes. Un barrio (a)bajo, una señal. El charquito que se hizo río y que inundó de sueños.
Las bandas de música que se pelean, "lo hacen por guita", dice la independencia, y se terminan separando por la cara de Roca. Los analistas que rellenan espacios y se sientan a explicarnos el mundillo de la aritmética después de leer el diario. Las explicaciones para todos, el petróleo. La nueva mafia, la de los manteros, esos puesteros giles que venden películas cagándole la vida y el trabajo a toda la Warner Bross. El humor como pieza de pensamiento. La burla que denuncia la estafa corriéndose de la denuncia. La historia de las personas que en cada acto de destrucción encuentra su respuesta, tarde o temprano, en un acto de creación. Las parte de una trama que nos contaron los dueños de la palabra semidesnuda. La parte que falta desandar y revisar para que el populismo sienta que sus tripas pueden respirar tranquilas.
Escribis muy bien Me ha gustado tu blog
ResponderEliminarHola Resident, La vida es una barca dijo Calderón de la mierda, últimamente no se que postear si ésto parece el cuento de la buena pipa.
ResponderEliminarMejor voy a comprar yerba ahora que bajó y me tomo unos mates.
Saludos grandes Resident.
MuCha, gracias por la crítica
ResponderEliminarRobert aprovechá la oferta y compartí el sentimiento nomás. Gran abrazo.
Usted tendría que escribir más seguido, don Residente.
ResponderEliminarBuenísimo el texto.
Abrazo.
Quizás, pero no suelo moverme con temas de actualidad (desde lo estricto), eso conspira con una eventual continuidad. Abrazo
ResponderEliminarSi tiene todo eso adentro, no hay excusa que lo excuse por no sacarlo afuera mas seguido. Un abrazo
ResponderEliminarAmigo Residente, muy buen texto.
ResponderEliminarEs impresionante cómo funciona la "fábrica de opinión". Ayer, Día del Padre, discutí amigablemente con mi viejo, de 82 años, por "la plata de los jubilados", y le volví a explicar qué pasaba con "la plata de los jubilados" cuando la administraban las AFJP, y que ahora esa plata se está usando para crear más trabajo en blanco, ergo, más aportes que permitan mejorar el haber jubilatorio. Donde tuve que darle la razón es con el pago de juicios por mala liquidación (lo que es su caso). Dejamos de discutir sobre el tema porque comenzaban los partidos de fútbol, y como teníamos dudas acerca del horario de un partido, se me ocurrió fijarme en su diario Clarín: en la tapa decía que el gobierno había llegado al punto máximo en el uso de la "plata de los jubilados", por supuesto, allí encontré el origen de la discusión. Y este sencillo ejemplo va en la línea de lo que vos decís: las dificultades que tiene un proyecto nacional y popular, que en la propaganda mediática sólo está intersado en rapiñar "la Kaja" y eternizarse en el poder...
Abrazo
Atilio, Sujeto, gracias por el aporte a éste modesto espacio.
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